La pérdida del habitad en las especies en el caso de las amazonas en el contexto de los últimos 10 años
Se registró una deforestación en los últimos diez años, lo que ha generado preocupación acerca de la pérdida de biodiversidad y los efectos de los cambios climáticos. Se observaron las causas y las consecuencias de la deforestación en la Amazonía con el objetivo de analizar los patrones de deforestación y sugerir rutas sostenibles para obtener un mejor punto de vista. Se observaron claramente los objetivos de contribución en el ámbito académico y político. Para esta investigación, se examinaron revistas, artículos y libros, así como páginas de Internet de fuentes confiables. Esto se debe a que no podíamos confiar en cualquier página de Internet debido a la posibilidad de que contenga información errónea. En comparación con Francia, la selva amazónica, conocida como el pulmón del mundo, ha sufrido una pérdida forestal significativa desde 1970. Las estadísticas de deforestación son preocupantes, ya que en 2012 se deforestaron 4.571 km2, en comparación con la cantidad más alta de 29.059 km2 registrada en 1995. Se ha descubierto que los acuíferos de la cuenca amazónica tienen profundidades significativas, lo cual es alarmante, ya que es posible que se contaminen antes de que se estudien y utilicen de manera sostenible. También se puede mencionar la importancia de las especies en la selva amazónica, ya que se dice que contiene al menos una de cada diez especies que existen en la Tierra. Sin embargo, los incendios han empeorado las cosas, especialmente durante la estación seca.
ESTUDIANTES, CONGRESO 2024CONSERVACIÓN DEL MEDIO AMBIENTE
Keila Alejandra Osoria Cibrián, Ayari Gómez Quintero
4/23/2024
Palabras clave: consecuencias, habitad, biodiversidad, causas, especies.Palabras clave: consecuencias, habitad, biodiversidad, causas, especies.
Introducción. En este artículo se habla de "El problema de la pérdida del hábitat en las especies en el caso de las amazonas en el contexto de los últimos 10 años". ¿Cómo se fue implementando el problema de la pérdida de hábitat de las especies en el caso de las amazonas en el contexto de los últimos 10 años? Como hipótesis tenemos los daños en los bosques de las amazonas (variable X). Pérdida del hábitat en las especies (variable Y). La pérdida de la habitad en el caso de las especies amazónicas tiene unas consecuencias bastante relevantes para la biodiversidad y el ecosistema. Podemos decir que una de las desfavorables consecuencias que podremos tener sería que el habitad se reduciría. Sabemos que la Amazonía lleva un historial de disminución drástica e incluso la desaparición de aves compuestas de distintas especies. Estas aves vuelan juntas por protección y para aprovechar sus distintas habilidades. Lo que nos lleva a otro punto sería que la biodiversidad se pone en riesgo, ya que se conoce que la Amazonía lleva un buen porcentaje de la biodiversidad del planeta y con esto también los seres humanos quedamos expuestos a más peligros.
Agregando también que el desbalance climático se suma a la pérdida de masa forestal "La destrucción de la selva amazónica hasta hoy es mucho más grande que el casi 20 % del que se habla en los medios de comunicación" (Costa, 2020) y el aumento de los incendios en la Amazonia, podrían afectar su capacidad de absorción de carbono. Esto no sólo afecta la estabilidad actual de los bosques amazónicos, sino que también podría incidir en el balance climático global…
También buscamos conocer cómo van avanzando los daños que se causan en el bosque de las amazonas, por medio de investigación documental. Si hay daño en el bosque del Amazonas, probablemente exista pérdida de habitabilidad en las especies.
Objetivos. En la investigación de la perdida de especies en el caso de las amazonas, nos proponemos a analizar y comprender por qué y cómo está sucediendo la disminución de la diversidad biológica en este contexto, además de comprender cómo afecta los ecosistemas la perdida de especies. Por otro lado, identificar cuáles son las razones de las cuales son responsables la degradación del hábitat, la extinción de especies, etc.
Metodología. El diseño de nuestra investigación fue cualitativo-descriptivo. "La investigación cualitativa es uno de los tipos de investigación más usados. Este estudio analiza las bases de la investigación cualitativa, sus enfoques, planeamiento y herramientas necesarias para su buena implementación. El propósito del estudio es poder comprender y demostrar la fortaleza de esta metodología de investigación. (Auxiliadora G. B., 2016) La investigación documental es una de las técnicas de la investigación cualitativa que se encarga de recolectar, recopilar y seleccionar información de las lecturas de documentos, revistas, libros, grabaciones, filmaciones, periódicos, artículos, resultados de investigaciones, memorias de eventos, entre otros; en ella la observación está presente en el análisis de datos, su identificación, selección y articulación con el objeto de estudio. (Dávila, 2015)
Resultados y discusión
De acuerdo con los datos proporcionados por Greenpeace, la selva amazónica, considerada como el corazón del planeta, ha perdido una extensión forestal que supera el tamaño de Francia desde 1970. La causa principal de la gran pérdida de bosques de las Amazonas (variable X) es la deforestación, que es principalmente causada por la actividad humana. La Amazonía es el bosque tropical más grande del mundo, con una superficie de alrededor de siete millones de km2. Se extiende a través de nueve naciones, destacando Bolivia, Perú, Colombia y, en particular, Brasil, que alberga el 60 %. Está clasificada como una de las siete maravillas naturales del mundo en 2011. Además de ser una reserva única de biodiversidad y hogar de culturas indígenas ancestrales que nos ayudan a comprender mejor quiénes somos, se considera el pulmón del planeta.
Desde 1970, según datos de Greenpeace, solo la Amazonía brasileña ha perdido una superficie forestal superior al tamaño de Francia. Este mismo año, de acuerdo con el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE) de Brasil, se batía el récord de deforestación en un mes de abril con 580 km2 perdidos, un 42 % más que en el mismo mes de 2020. Un dato poco halagüeño si tenemos en cuenta que la temporada seca, la de mayor destrucción, empieza en mayo y alcanza su apogeo en agosto.
Las cifras son especialmente preocupantes, además, porque duplican las de hace solo unos años. En 2012, la deforestación en la Amazonía brasileña se redujo hasta los 4.571 km2, la cifra más baja desde que el INPE comenzara a realizar mediciones por satélite en 1988 a través del programa TerraBrasilis. La cifra más alta, en cambio, se dio en 1995 con 29.059 km2 de selva desaparecidos, seguida por los 27.772 km2 de 2004. A partir de entonces, con la llegada de Lula da Silva al gobierno, esa cifra fue cayendo hasta alcanzar el mínimo citado de 2012 para, a continuación, rebotar hasta los alarmantes datos actuales.
Iberdrola. La deforestación hace saltar las alarmas en la Amazonia, ¿cómo podemos frenarla? 2020
Recientemente se ha encontrado un inmenso acuífero muy profundo en parte de la cuenca amazónica y territorios colindantes. Se trata de un gran hallazgo; nadie lo duda. Ahora bien, puede estar comenzando a contaminarse antes de conocer su estructura, dinámica y posibilidades de uso sostenible. (José, 2015) Los investigadores que han llevado a cabo el estudio reconocen que las capas profundas deben actuar como ambientes buffer o tampón, reteniendo los contaminantes y fertilizantes que causan graves problemas en los perfiles del suelo más someros de Europa o EE. UU., por citar dos ejemplos. Sin embargo, sería sumamente irresponsable pensar que todas las profundas coberturas edáficas de la región estudiada en Brasil reaccionan de la misma manera; que el proceso no pueda revertirse con el tiempo y que los resultados induzcan a inferir que se pueden añadir elevadas dosis de fertilizantes a estos ecosistemas que, dicho sea de paso, debieran ser conservados como patrimonio de la humanidad en lugar de ser presa de la deforestación con las agresivas prácticas de la agricultura industrial”.
Los suelos profundos del Mato Grosso, por su gran profundidad y permeabilidad, retenían los contaminantes (agroquímicos) producidos por la agricultura industrial, sin verterlos a las aguas corrientes, de lo cual terminaba infiriéndose acerca de sus bondades con vistas a que tales prácticas agrícolas no contaminaran las aguas y como corolario deñaran al medio ambiente y la salud humana. También se comenta sobre el suceso de que lo que podía acaecer en el futuro era lo que se denomina “bomba química del tiempo”. Pues bien, posteriormente otra noticia, independiente de la primera, y que llevaba por título” La Amazonía tiene un océano subterráneo” y en la que puede leerse “La Amazonía posee una reserva de agua subterránea con un volumen calculado en más de 160 billones de metros cúbicos” Ese volumen es 3,5 veces mayor que el del Acuífero Guaraní, un reservorio subterráneo de agua dulce que abarca territorios de Uruguay, Argentina, Paraguay y fundamentalmente Brasil, con 1.200.000 kilómetros cuadrados (km²) de extensión. «Esa reserva subterránea representa más del 80 % del total de agua de la Amazonía».
En el caso de la pérdida del habitad en las especies (Variable Y) la selva amazónica —que alberga a una de cada diez especies de la Tierra— está ardiendo. Se ha arrojado el dato que en una sola semana ocurrieron 9000 incendios activos en la vasta selva brasileña y se estaban extendiendo a Bolivia, Paraguay y Perú. Los incendios, la mayoría provocados para despejar el terreno para la ganadería, la agricultura y la tala, se han visto agravados por la estación seca. Ahora arden en masa, un aumento de un 80 por ciento frente al año pasado, según el Instituto Nacional de Investigación Espacial de Brasil (INPE, por sus siglas en portugués). Los incendios pueden verse desde el espacio.
Para los miles de especies de mamíferos, reptiles, anfibios y aves que habitan la Amazonía, las consecuencias de los incendios forestales vendrán en dos fases: una inmediata y otra a largo plazo.
«En la Amazonia, nada está adaptado al fuego», afirma William Magnusson, investigador especializado en supervisión de la biodiversidad en el Instituto Nacional de Investigaciones de la Amazonia (INPA, por sus siglas en portugués) en Manaos, Brasil.
En algunos bosques, los incendios son fundamentales para mantener la salud del ecosistema. Los animales están adaptados a ellos y muchos incluso dependen de ellos. Por ejemplo, el pico ártico (Picoides arcticus).
Autóctono del oeste de Norteamérica, solo anida en árboles quemados y consume los escarabajos que infestan la madera quemada. (Tremblay, 2020)
Según Magnusson, la selva alberga una abundancia y una diversidad tan únicas precisamente porque no arde. Aunque a veces se producen incendios de forma natural, suelen ser a pequeña escala y arden cerca del suelo. Además, la lluvia los extingue enseguida.
«Básicamente, el Amazonas no había ardido así en cientos de miles o millones de años», afirma Magnusson. No es como Australia, por ejemplo, donde los eucaliptos se mueren sin incendios regulares. En los últimos años, la selva amazónica se ha visto afectada por una cantidad creciente de incendios provocados por humanos que ponen en peligro el ecosistema. La Selva no está preparada para el fuego.
En el caso de los animales que habitan aquí, se dice que, en medio de un incendio, los animales tienen pocas opciones. Explica que pueden intentar ocultarse bajo tierra o entrar en el agua. Pueden verse desplazados. O pueden morir. Según Sullivan, en esta situación muchos animales morirán por las propias llamas, el calor o la inhalación de humo.
Los resultados arrojaron que en La Amazonia posee una reserva de agua subterránea con un volumen calculado en más de 160 billones de metros cúbicos, ese volumen es 3,5 veces mayor que el del Acuífero Guaraní, un reservorio subterráneo de agua dulce con 1.200.000 kilómetros cuadrados (km²) de extensión. «Esa reserva subterránea representa más del 80 % del total de agua de la Amazonía; además, los incendios pueden verse desde el espacio.» Para los miles de especies de mamíferos, reptiles, anfibios y aves que habitan la Amazonía, las consecuencias de los incendios forestales vendrán en dos fases: una inmediata y otra a largo plazo.
Conclusiones Durante los últimos 10 años, el problema de la pérdida de hábitat de especies en la Amazonía se ha abordado mediante una variedad de estrategias e iniciativas. Se presta especial atención a la conservación de áreas protegidas, la promoción de prácticas agrícolas sostenibles y la regulación de la tala ilegal.
En la región amazónica se han creado y fortalecido parques nacionales y reservas naturales para preservar los ecosistemas y asegurar la supervivencia de las especies que los habitan. Estas áreas protegidas son administradas conjuntamente por gobiernos, organizaciones no gubernamentales y comunidades locales, promoviendo la participación comunitaria activa en la conservación del medio ambiente.
Además, se fomenta la adopción de prácticas agrícolas sostenibles en la Amazonía, promoviendo el desarrollo de la agroforestería y la agricultura baja en carbono. Estos métodos pretenden combinar la producción agrícola con la conservación de los bosques, evitando la expansión agrícola descontrolada y la deforestación.
En el aspecto regulatorio, se han implementado políticas para combatir la deforestación ilegal en la Amazonía. Se han fortalecido las medidas de control y vigilancia en las zonas de mayor riesgo y se han establecido mecanismos de trazabilidad para asegurar la legalidad de la producción y el comercio de productos forestales.
Sin embargo, a pesar de estos esfuerzos, la pérdida de hábitat de especies en el Amazonas sigue siendo un problema. Las presiones de la expansión agrícola, la extracción de recursos naturales y el cambio climático continúan amenazando la biodiversidad de la región. Por lo tanto, es imperativo continuar fortaleciendo las medidas de conservación y fomentar la participación activa de todos los actores involucrados en la protección de este invaluable ecosistema.
Fuentes de información.
Bibliografía
Auxiliadora, G. B. (febrero 2016). La investigación cualitativa.
Costa, C. (febrero de 2020). “La gran mentira verde”: como la pérdida del Amazonas va mucho más allá de la deforestación. .
Dávila, G. (2015). La investigación documental para la comprensión ontológica del objeto de estudio.
José, I. J. (24 de junio de 2015). Un mar de Agua Bajo los Suelos del Amazonas: el riesgo de destruir antes de entender.
Tremblay, J. (2020). Birds of the world.
Zent, S. (2002). Impactos ambientales generadores de biodiversidad: conductas ecologicas para los hote de la sierra maigualida.
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